¡Descubre el encanto de esta acogedora casa de pueblo! Situada en un entorno tranquilo, esta vivienda de dos plantas te ofrece la combinación perfecta entre tradición y comodidad. Con 126 m² construidos y 100 m² útiles, la casa cuenta con un amplio salón diáfano donde podrás disfrutar de la calidez de su chimenea en las noches de invierno. La cocina y una salita de estar con otra chimenea completan los espacios comunes en la planta baja, donde también tienes la opción de crear un dormitorio o un trastero adicional.
En la segunda planta, encontrarás tres dormitorios que te brindarán el espacio necesario para toda la familia. Además, existe la posibilidad de añadir un cuarto de baño bajo la terraza, adaptando la casa a tus necesidades. Construida en 1950 y en buen estado, esta joya rústica te espera para que la conviertas en tu hogar.
Con una parcela de 69 m², es el lugar ideal para aquellos que buscan un refugio tranquilo sin renunciar a las comodidades modernas.
No dispone de calefacción, lo que te permite personalizarla a tu gusto.